Detectan plaguicidas en el agua de la Escuela N° 6185 “República Argentina"

El informe oficial de la Universidad del Litoral

Padres y docentes de la escuela "República Argentina", ubicada en el paraje San Roque del distrito San Justo, en la provincia de Santa Fe, están preocupados hace rato por las fumigaciones ilegales. Y se ocuparon de hacer visible el problema a través de acciones concretas: organizaron un abrazo solidario, convocaron a las autoridades municipales y se acercaron hasta el Concejo Deliberante para pedir información a los ediles locales e interpelarlos acerca de su accionar al respecto. Fue de esta manera que los tutores de los alumnos pudieron acceder al informe técnico No. 778 realizado el 14 de agosto de este año por el PRINARC (Programa de investigación de Residuos y Contaminantes Químicos), dependiente la Facultad de Ingeniería Química - Universidad del Litoral.

El informe solicitado por la Municipalidad de San Justo, correspondiente a la muestra 2208P007, que se publica de manera completa en este portal informativo, tiene como objetivo "determinar residuos de plaguicidas en muestra de agua". Los datos indican la presencia de moléculas en bajas dosis, aunque los parámetros "excesivos" sean establecidos por organismos cooptados por las empresas que venden lo venenos. Sin embargo, tampoco existen estudios precisos de cuál es el efecto sinergia o de incremento de la acción tóxica por conjunción de las diversas sustancias, solo investigaciones individuales aplicadas a cada una de las moléculas halladas.

La sumatoria de los químicos encontrados en el agua que beben los niños de la escuela 6185 del paraje San Roque nos pone ante una realidad alarmante que exige la aplicación del Principio Precautorio consagrado en la Ley General de Ambiente. Las moléculas que se observan en el estudio en bajas dosis pueden producir efectos en la biodiversidad y en la salud humana, alterando enzimas, hormonas y mecanismos de detoxificación. La Comunidad Europea estableció en 1998, con la Disposición 83, que en la mayoría de los casos, el límite de presencia tolerable de pesticidas en el agua de consumo humano es 0,1microlitro; y que 0,5 microlitro es el límite máximo para el cóctel de agrotóxicos en muestra de agua. 

En Argentina, el límite tolerable de pesticidas en agua rige a través del Código Alimentario Nacional que, a su vez, está basado en resoluciones de la OMS (Organización Mundial de la Salud) de la década del 90´del siglo pasado. Es imperioso reconocer que en los últimos 20 años el desarrollo y aplicación de tecnología agroindustrial dio un salto cuántico con la implementación del paradigma transgénico como modelo imperante. Por ello, es muy probable que cualquier estudio de aguas en la zona esté dentro de los márgenes aceptables del Código vigente. Especialistas consultados por este medio aseguran que es una lista desactualizada, "una regla de medición descalibrada"  donde "decenas de compuestos que se usan hoy en el modelo de producción no están incluidos y los que sí lo están, tienen valores  superiores a cien veces al número permitido en la Comunidad Europea", como si los venenos no contaminaran de la misma forma en distintos continentes. "¿Seremos los latinos más resistentes a los plaguicidas que los europeos?". 

La comunidad de San Roque está cada vez más movilizada con este tema. El jueves habrá una reunión clave en el Concejo Municipal de San Justo. Estarán funcionarios, sectores ligados al agroconcentrado y los afectados directos por las fumigaciones. Será un buen momento para exigir, tratándose de niños, que se apliquen medidas Precautorias, consagradas en la ley ambiental vigente, considerando la Vida de todos como un valor muy superior a custodiar por encima del derecho a la Renta de unos pocos, aunque sea por sentido común.

El principio de Precaución o principio Precautorio es un concepto que respalda la adopción de medidas protectoras ante las sospechas fundadas de que ciertos productos o tecnologías crean un riesgo grave para la salud pública o el medio ambiente, pero sin que se cuente todavía con una prueba científica definitiva.

¿Qué pruebas tienen los que venden y usan estos agroquímicos para decir que no están enfermando a esos niños? Qué médico sería capaz de firmar un informe donde diga que a esos niños no le va a pasar nada si siguen bebiendo o lavándose la cara y las manos con ese agua que carga diversidad de moléculas de pesticidas?